Llega el calor y las ganas inmensas de degustar un helado. Y te encuentras que tienes Diabetes Gestacional. ¿Qué hacemos? ¿Comemos y nos sentimos culpables o esperamos a finalizar el embarazo?
No te preocupes, afortunadamente hay varias alternativas para saciar ese antojo. Pero dependerá en gran medida en la situación en la que te encuentres; en casa, en una piscina, de paseo, de shopping…Y adaptar el consumo a tu dieta, a los hidratos de carbono consumido en ese día.
El helado se puede consumir en el postre o en la merienda, para que la absorción sea lenta, con lo que tendrás que suprimir la fruta obligatoria de la dieta de Diabetes Gestacional. Sigue leyendo